El único pago que reciben este grupo de jóvenes clauns, son las gracias y la felicidad que provocan sobretodo en los niños del área de pediatría. “Es importante el afecto y la alegría para poder estar bien de salud, esto influye en el aspecto neuropsicológico. Ayudamos a la gente a que entiendan que se pueden curar. Un hospital no es un cementerio donde hay que estar tristes, un hospital es para curarse y estar alegres porque vamos a salir bien”, refiere Maribel integrante de “Bola Feliz”.
La agrupación tiene una antigüedad de 3 años visitando diversos hospitales y en la actualidad es integrada por 40 jóvenes voluntarios. “La risa es para todos, siempre hay voluntarios activos y acondicionan sus horarios una hora a la semana, para hacer esta labor” concluye Maribel.
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