miércoles, 25 de marzo de 2015

Unchupayco. Lo Máximo

foto Juan Guevara
Hace algunas horas, se han registrado las primeras e iracundas bullas que soportará a lo largo de los 4 años, el señor a quien no le gusta que lo llamen Gobernador. Fueron ciudadanos de la provincia de Concepción que voz en cuello reclamaron la restitución del Presupuesto destinado a la ejecución del Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas. Con todo derecho.

Es que la ‘mala maña’ dio lugar a la manipulación del CRJ desde el Ejecutivo, tan mala era la maña que el mecanismo tuvo que caerse de por si, por cuanto la maniobra no tenía sustento legal ni técnico, era evidente que estaba apenas escoltada con el capricho del ‘mandatario’. Cosa que no es nueva, solo que antes se quitaba el presupuesto a las provincias con la sagacidad de los pendejos y la anuencia de algunos alcaldes badulaques. Esos, del “sí señor”.

Desde mi experimentado punto de vista, puedo señalar con meridiana claridad, que aquí no hay actos heroicos, ni se tiene por qué convalidar las expresiones oportunistas de solidaridad. Lo que hay, es un gesto de estupidez en el ejercicio de la función pública, y es estúpido aquel que actúa con necedad sabiendo que la Ley le prohíbe determinado accionar o en su defecto le obliga actuar con probidad.

Pero, cada sandez termina por inmacular al faite que negociaba con Belaunde para hacer ‘obras’ justamente quitándole plata a los demás o beatifica a la recalcitrante alumna que se hacía regalar cochecitos para su párvulo a cambio de legislar en favor de las chinganas llamadas AFOCAT. Así que reitero, la cosa no es nueva, solo que antes eran más pendejos.

Hasta más vernos.

Gines Barrios Alderete

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