Con apoyo de una retroexcavadora gestionada por Defensa Civil
Jornada la encabezó alcalde José Auqui Cosme
Dando cumplimiento a la promesa efectuada por el alcalde distrital de Chilca Mg. José Auqui Cosme; personal de la oficina de defensa civil de la mencionada Municipalidad, acudió hasta el barrio Echadero, para desarrollar una jornada de limpieza y encauzamiento de un canal que pasa por el pasaje los Eucaliptos, el mismo que hace días atrás se había desbordado originando la inundación de varias viviendas de los moradores que habitan en las orillas.
El propio burgomaestre chilquense, dirigió la tarea que tuvo la necesidad de contar con una retroexcavadora que fue gestionada por Defensa Civil, con el propósito de profundizar y ensanchar el cauce que lucía malezas, lodo y otros desperdicios, lo que impedía su libre discurrir de las aguas acumuladas, producto de las constantes lluvias y granizadas que viene cayendo en esta temporada; por lo que los propios vecinos se reunieron y apoyaron la jornada con picos, lampas y otros.
Al respecto, el alcalde José Auqui, señaló que como entidad tiene la obligación de atender las necesidades de los ciudadanos, más aún si se trata de afectados con la inundación de sus predios, muchas veces con saldos muy lamentables y precisamente para evitar ello, ha dispuesto que en esta época se continúe desarrollando descolmatación, encauzamiento y limpieza de afluentes.
Como es de conocimiento, recientemente varias viviendas ubicadas en los pasajes San Pedro, Eucaliptos y jirón Túpac Amaru, en el barrio Echadero, muy cerca al colegio Fe y Alegría, resultaron inundadas, perjudicando a múltiples familias, que en uno de los casos perdieron parte de su rústica vivienda, algunos objetos de valor, incluso la muerte de sus animalitos menores.
Ante esta triste realidad y pesadilla que les tocó pasar por espacio de varias horas; los agentes de Serenazgo de Chilca, provistos de motobombas, baldes y otros acudieron paralelamente a los sectores afectados, para brindar el apoyo necesario para retirar las aguas de los predios que se habían convertido en lagunas, donde la peor parte la llevó la señora Lorenza Morales Sullucuco (40), quien sufrió el colapso de una de sus habitaciones, convirtiéndose su interior en todo un lodazal.
