Esta tradicional fiesta es una expresión vinculada a los niveles histórico, simbólico, social y organizacional que combina relatos y pasajes de la época colonial representando simbólicamente la lucha de los cristianos contra los moros y la defensa del territorio nacional, costumbre originaria de España y traída al Perú por los conquistadores para conmemorar la expulsión musulmana de la península Ibérica.
La fiesta dura cinco días y se puede espectar a los batalladores, caporales, y músicos recorriendo las calles del distrito al ritmo de la danza, simulando enfrentamientos con troncos de maguey que llevan como armas.
Los danzantes ingresan a la plaza por distintas calles: los Ccanay Parte ciudadanos de mayor estatus económico que vivían en la parte alta del pueblo, cuyos miembros tenían apellidos españoles ingresan por una calle; y por otro lado los Huray Parte que representa a la población campesina pobre que habitaba la parte baja del pueblo cuyos apellidos son quechuas, ambos encabezados por sus respectivos caporales.
Actualmente esta fiesta costumbrista se combina con actividades tradicionales como el yaykupakuy, la víspera, misa, procesión, desfile artístico y pasacalles que disfruta la población y gran número de visitantes que arriban a Conayca para espectar y participar de esta fiesta ancestral.
El Gobierno Regional Huancavelica, felicita a las autoridades de Conayca por el reconocimiento de esta expresión cultural autóctona que a través de la Dirección Desconcentrada de Cultura ha logrado ser catalogada como Patrimonio Cultural inmaterial de la nación y brindará todo su apoyo para su difusión y conocimiento regional y nacional de esta fiesta costumbrista conayquina.
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