El gerente de Servicios Públicos de la Municipalidad Distrital de Chilca, José Alfredo Larrazábal Sánchez, fue absuelto de toda responsabilidad de la denuncia que fue interpuesta por la Fiscalía del Medio Ambiente y la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental, por el presunto delito de ambiental en la modalidad de incumplimiento de las normas relativas al manejo de residuos sólidos, en agravio del Estado, durante la operación del botadero controlado de Llamus, en el anexo de Auquimarca.
El Primer Juzgado Penal de Huancayo, determinó no abrir instrucción contra el funcionario al no existir indicios suficientes de la existencia del delito de contaminación al medio Ambiente durante la operación del vertedero de LLamus que puedan perjudicar gravemente la calidad del ambiente. Según la diligencia efectuado por el órgano jurisdiccional, el botadero controlado instalado sobre los causes de los ríos Mantaro y Chilca, no atenta contra la contaminación, por lo cual el juez determinó no ha lugar la apertura de instrucción, mediante resolución N° 1 del 27 de agosto del 2013.
Sobre el mismo delito, pero en otro proceso el alcalde del distrito Abraham Carrasco y el Gerente Municipal, Mario Lazo, fueron excluidos en la etapa de investigación preliminar al no existir indicios suficientes del delito.
Al respecto, el gerente de Servicios Públicos Locales, José Larrazábal, refirió que la denuncia que le interpusieron contra el medio ambiente, no tiene sustento. “El tema fue manejado políticamente por los adversarios a la gestión, que satanizaron el manejo adecuado de residuos que se efectuaba en el botadero controlado de Llamus”, expresó.
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