El jefe de Seguridad Ciudadana de la municipalidad del distrito cusqueño de Pichari, Carlos Sánchez Uriol, denunció que numerosas mafias dedicadas a la trata de personas están captando con engaños a menores de edad de las comunidades nativas del VRAE para explotarlas sexualmente en los “prostibares”.
“La captación de menores de edad se incrementa de manera notable en el VRAE. Lo más preocupante es que estas mafias están ingresando a las comunidades nativas ashánincas y captan a las menores con falsas promesas de trabajo. Les ofrecen sueldos altos para que acepten”, indicó Sánchez Uriol.
En conversación con el programa Diálogo Ciudadano de INFOREGIÓN, que se transmite desde San Francisco en el
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VRAE, indicó que las menores de edad, que son llevadas a los “prostibares”, inicialmente son obligadas a trabajar como meseras o acompañantes, y luego a prostituirse.
“Lamentablemente hay sujetos pervertidos que prefieren a muchachitas. Mientras más jóvenes son, el costo por el servicio se incrementa. Por eso, los proxenetas prefieren a menores de edad. Además, son más ingenuas ante los engaños”, indicó el jefe de seguridad ciudadana.
Urge regulación
En otro momento, señaló que durante los operativos que se realizan en estos establecimientos se logró verificar que no cuentan con documentos de identidad ni con los correspondientes carnés de sanidad.
“A través de los operativos en Pichari estamos regulando que las personas inmersas en la prostitución sean mayores de edad y tengan su carné sanitarios. Así mismo, los propietarios están advertidos, e incluso muchos ya han sido denunciados por el delito de trata de personas”, señaló.
Otra de las disposiciones adoptadas por la comuna de Pichari es que, a través de la Ordenanza Municipal 06 – 2011, se decretó que cualquier establecimiento dedicado a la venta de alcohol o sexo debe suspender la atención a partir de la medianoche.
Sánchez Uriol señaló que a través de los operativos se están reduciendo los problemas en la zona conocida como la Curva Maldita. “Sin embargo, los que incumplen las leyes están invadiendo otras zonas o migran a otros distritos donde no hay control. Las autoridades estamos para hacer cumplir las leyes”.
“La captación de menores de edad se incrementa de manera notable en el VRAE. Lo más preocupante es que estas mafias están ingresando a las comunidades nativas ashánincas y captan a las menores con falsas promesas de trabajo. Les ofrecen sueldos altos para que acepten”, indicó Sánchez Uriol.
En conversación con el programa Diálogo Ciudadano de INFOREGIÓN, que se transmite desde San Francisco en el
VRAE, indicó que las menores de edad, que son llevadas a los “prostibares”, inicialmente son obligadas a trabajar como meseras o acompañantes, y luego a prostituirse.
“Lamentablemente hay sujetos pervertidos que prefieren a muchachitas. Mientras más jóvenes son, el costo por el servicio se incrementa. Por eso, los proxenetas prefieren a menores de edad. Además, son más ingenuas ante los engaños”, indicó el jefe de seguridad ciudadana.
Urge regulación
En otro momento, señaló que durante los operativos que se realizan en estos establecimientos se logró verificar que no cuentan con documentos de identidad ni con los correspondientes carnés de sanidad.
“A través de los operativos en Pichari estamos regulando que las personas inmersas en la prostitución sean mayores de edad y tengan su carné sanitarios. Así mismo, los propietarios están advertidos, e incluso muchos ya han sido denunciados por el delito de trata de personas”, señaló.
Otra de las disposiciones adoptadas por la comuna de Pichari es que, a través de la Ordenanza Municipal 06 – 2011, se decretó que cualquier establecimiento dedicado a la venta de alcohol o sexo debe suspender la atención a partir de la medianoche.
Sánchez Uriol señaló que a través de los operativos se están reduciendo los problemas en la zona conocida como la Curva Maldita. “Sin embargo, los que incumplen las leyes están invadiendo otras zonas o migran a otros distritos donde no hay control. Las autoridades estamos para hacer cumplir las leyes”.
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