Un oficial de la PNP, un suboficial y un expolicía, detenidos la madrugada de este sábado en Ayacucho, quedaron libres a pesar que una primera prueba diera positivo para PBC en el vehículo que se desplazaban.
La intervención se produjo cerca a las 4 de la madrugada en el sector de Yanama (a 2 kilómetros de la ciudad de Ayacucho) a cargo de la Policía de Carreteras, luego que se lanzara la información que horas antes en esa zona se había registrado un asalto a burriers que transportaban pasta básica de cocaína.
Ante la voz de alto, los ocupantes del vehículo station wagon adujeron ser miembros de la Policía Nacional y, ante la amenaza de hacer uso de sus armas de reglamento si es que no se identificaban, uno de ellos se identificó como el teniente de la PNP Delgado Andía y su acompañante como el suboficial de primera Tejada Ramírez, en tanto el sospechoso vehículo era conducido por el expolicía de apellido Cerrón, más conocido como el “Negro Cerrón”, quien se encuentra con libertad condicional por tráfico ilícito de drogas.
Tras la intervención, el teniente Delgado Andía habría justificado que retornaban de un paseo particular por las alturas de esa zona andina. Por lo que el vehículo y sus tres ocupantes fueron puestos a disposición de la unidad de OFITI de Ayacucho, donde según una primera prueba con los reactivos, habría dado positivo para pasta básica de cocaína.Sin embargo, horas después la investigación habría sido asumida directamente por el jefe de la Región Policial Ayacucho, Crnl. PNP Aureo Menfis Gil Guillén, cuando en realidad correspondía a la unidad especializada de antidrogas.
Luego en horas de la mañana se comunicó “oficialmente” que el vehículo intervenido no contenía ningún residuo de estupefacientes, por lo tanto los 3 intervenidos quedaron libres.
De acuerdo a una fuente confidencial, que se contactó con Crónica Viva, se sabe que el teniente Delgado Andía es muy cercano al coronel Gil Guillén. Además el oficial se encuentra de vacaciones y su familia reside en la ciudad de Lima.
Por su parte el suboficial Tejada Ramírez, si bien no tiene antecedentes de haber sido sancionado por tráfico ilícito de drogas, sin embargo, según el servicio de inteligencia de la misma IX Dirtepol de Ayacucho, “existen varias evidencias sobre posibles atracos a posibles mochileros”.
Con todos estos antecedentes, esta investigación debió haber sido asumida por la unidad de antidrogas por un espacio de 15 días, tal como ocurre con las personas civiles que son detenidas por similares sospechas..
crónica.com
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