El Defensor del Pueblo de Ayacucho, Jorge Fernández Mavila, aseguró que existen razones suficientes para abrir una oficina de la Defensoría en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) pero la falta de presupuesto y voluntad política impiden que esto se concrete.
“Indudablemente sería lo más razonable abrir una oficina -de la Defensoría del Pueblo- sobre todo teniendo en consideración la magnitud y lo que representa el VRAE, pero lamentablemente existen limitaciones ajenas a nuestra institución como es el presupuesto y la decisión de las autoridades”, reconoció.
En conversación con INFOREGION, Fernández Mavila indicó que pese a las limitaciones económicas y geográficas, su despacho llegó a atender en el 2011 un aproximado de 600 casos, entre investigaciones judiciales, queja por ausencia injustificada de docentes, falta de respuesta oportuna de las autoridades, etc.
Fernández Mavila destacó que entre los distritos y comunidades con mayor atención están Llochegua, Canayre y Ayahuanco, éste último por pertenecer a Vizcatán, zona de presencia de grupos de remanentes senderistas y de paso del narcotráfico.
“Nosotros damos prioridad, sobre todo, a la población del VRAE por ser una zona bastante compleja y que requiere una atención permanente. Estamos en constante coordinación con las autoridades de las zonas lejanas como Ayahuanco porque es uno de los distritos más sufridos, ahí está el famoso Vizcatán, zona de paso del narcotráfico y del terrorismo”, analizó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario