El discurso

No llegó el esperado anuncio político que ponga fin al tema Conga y a los conflictos que amenazan la estabilidad del país. Crear unidades de conflicto regionales dependientes del Ministerio de la Presidencia es la formalización y burocratización de los conflictos que se alargan en las mesas de diálogo. El no reconocer que gran parte de los conflictos tienen una connotación política desestabilizadora de Sendero Luminoso, es ser parte del problema. La reforma constitucional para hacer del agua un derecho fundamental es un anunció para las galerías como aquella de la muerte civil, que esperamos se aplique también a los sentenciados por terrorismo que tampoco cumplen con sus deudas con el estado. La gran transformación, dijo, está en marcha y hasta ahora no sabemos de qué se trata.

No se anunció el reinicio de las operaciones del Centro Metalúrgico La Oroya, tal vez porque es un asunto privado pero de gran interés. Confirmó la construcción del gaseoducto andino del sur, mientras el viejo negocio de los camiones y balones llamado ahora gas virtual es un gran proyecto para los ingenuos. Ya explicarán en su momento de qué se trata el diseño de nuevas rutas turísticas a la selva central muy importante para la región.

Dijo que descanse en paz el Snip (Sistema Nacional de Inversión Pública) y se limitó a señalar la capacitación y reducción de plazos. Mejor hubiera defendido el programa de los gestores del congreso que fue desactivado porque era una plataforma política desde Lima hacía las provincias. Se necesita con urgencia asesorar a 1,600 gobiernos locales. No hay capacidad de gasto porque los proyectos locales se encuentran estancados o por la burocracia Snip o porque los proyectos carecen de argumentos científicos. Los técnicos saldrán ahora de las mismas localidades y necesitarán entrenamiento intenso para hacerles entender que el desarrollo de los pueblos se sustenta de manera técnica y no política, de modo que los proyectos sean útiles para la población y no huachafos monumentos para justificar el cumplimiento de los presupuestos. Saludamos el anuncio de obras de impacto social por impuestos que ejecutará el sector privado.

Fujimori juramentó como presidente hace 22 años y la situación peruana era totalmente diferente. Heredaba una crisis económica espantosa,  el terrorismo a punto del gran salto final y la moral alicaída de la gente. Toledo, García y Humala son los herederos de una verdadera y gran transformación sustentadas en la pacificación y la economía nacional. Esa gran transformación hace que Humala hable de exportaciones, de las cifras económicas y de la marca Perú que nos alienta. La gran transformación no es un discurso, es una dinámica viva que no se siente hasta ahora.
Manuel A. Gago