Glencore y Trafigura hacen todos sus esfuerzos por controlar el mayor complejo metalúrgico del Perú.
El mercado minero peruano ha venido observando la disputa entre las dos principales empresas que comercializan minerales en el mundo, por un lado, la multinacional Glencore International, con sede en Baar, Suiza, y Trafigura Beheer, instalada en Ámsterdam, Holanda, por el control de la principal empresa de fundición de metales en el Perú: el Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO), de propiedad de Doe Run Perú (DRP).
Las dos “traders” han mostrado interés en la empresa: Glencore, apoyando a la administración de DRP en su Plan de Reestructuración para reactivar y reiniciar las operaciones de la Fundición; y Trafigura, que a través de su filial Consorcio Minero S.A. (Cormin-Trafigura) estaba interesado en tomar el control de la compañía y aplicar su propio Plan, aunque según fuentes del sector, la intención de Cormin–Trafigura era la de liquidar a CMLO.
¿Quiénes son?
El origen de ambas es la empresa Marc Rich & Co, fundada en 1974 por el empresario norteamericano de origen belga del mismo nombre. Glencore se ha convertido en una de las principales empresas mineras a nivel internacional y líder como trader en el mundo. El 2011 marcó un hito en su historia por su salida a bolsa, emitiendo acciones US$ 11 mil millones. Hoy cotiza sus acciones en las bolsas de Londres y Hong Kong, por un valor de US$ 58,000 millones.
Desde 1994, Glencore es el principal accionista y controlador de Xstrata, minera de las grandes ligas a nivel mundial, de la que tiene actualmente el 34%, listando sus acciones en las bolsas de Londres y de Suiza. Xstrata tiene en el Perú el 33.75% de Compañía Minera Antamina y el 100% de Xstrata Tintaya y de Xstrata Las Bambas. El CEO de Glencore desde el 2002 es el sudafricano Iván Glasenberg, quien también es director de Xstrata y es propietario del 15.8% de las acciones de Glencore.
La presencia de Glencore en el Perú proviene desde la década de 1980. En la actualidad tiene el 97% de Empresa Minera Los Quenuales y el 100% de Perubar, de Inversiones República y de Glencore Perú. También participa con el 6% de Volcan Compañía Minera.
Apoya plan de reestructuración DRP
Glencore, acreedor de DRP, tiene una importante participación en el Plan de Reestructuración de Doe Run Perú que esta empresa ha presentado recientemente ante la Junta de Acreedores en el proceso concursal en marcha ante Indecopi. En sociedad con el Grupo Renco aportarán recursos por US$ 200 millones para la culminación del PAMA y el reinicio de operaciones de la Fundición, paralizada hace más de 30 meses.
La holding tiene una larga historia de financiamiento a empresas mineras en el Perú. En el 2003 prestó US$ 5.5 millones y otros US$ 40 millones el 2004 a Volcan, cuando esta minera estaba en mala situación financiera. En la actualidad tiene un acuerdo para financiar a Compañía Minera San Ignacio de Morococha por US$ 6 millones y ha dado un crédito de US$ 2 millones a la minera canadiense Trevali para que esta vuelva a operar la mina Santader en Huaral, paralizada hace más de 20 años, además de que Glencore operará su planta concentradora.
El principal negocio de Glencore en el Perú es la exportación de minerales que compra a diversos productores. Exportó minerales por US$ 556.9 millones el 2009, por US$ 738 millones el 2010 y hasta noviembre del 2011 había exportado US$ 76.8 millones. Glencore Perú, de reciente actividad, exportó minerales por US$ 622.9 millones el 2010 y hasta noviembre del 2011 había exportado US$ 1,582.6 millones.
El segundo
Trafigura Beheer fue fundada en 1993 por los franceses Claude Dauphin y Eric de Turckheim, ambos antiguos funcionarios de March Rich & Co. Controla en el Perú el 98.73% de Compañía Minera Condestable y el 100% de Cormin, de Impala Perú y de Catalina Huanca Sociedad Minera. También participa con el 30% en Azulcochamining, compañía que construye la mina de zinc Azulcocha en Junín, teniendo como socio a la minera junior Vena Resources.
La principal empresa del grupo Trafigura en el Perú es Cormin, que se dedica a comprar minerales a diversas empresas mineras, pequeñas, medianas y grandes, para exportarlo. El valor de sus exportaciones el 2009 fue de US$ 1,232.2 millones, el 2010 de US$ 1,690.6 millones y hasta noviembre del 2011 fue de US$ 2,227.8 millones, siendo el tercer exportador a nivel nacional, por detrás de Antamina y Southern Perú. Cormin también participa en Transportadora Callao con el 30%.
Un grave problema para Cormin-Trafigura es que enfrenta serias denuncias por contaminación. Su almacén de minerales en el Callao es responsable de la contaminación por plomo en la zona donde radica, que principalmente afecta a cientos de niños del colegio María Reiche, los que presentan niveles de plomo en la sangre entre 50 y 60 µg/dl cuando el máximo permitido por la OMS es 10 µg/dl.
En julio de 2011 se denunció que más de 80 mil pobladores chalacos se habían contaminado con plomo, acusando como uno de los principales responsables a la minera Cormin, “que transporta indiscriminadamente los metales por la zona para llevarlos a su almacén” (La República 25/07/2011). Se señalaba que la exposición a minerales como el plomo “viene ocasionando diversos daños a la salud de los pobladores, incluso ha causado la muerte”.
Otra empresa del grupo Trafigura, Catalina Huanca, ha tenido muchos problemas, siendo el principal el derrame del relave minero sobre la comunidad de Raccaya en la región Ayacucho el 27 de enero de 2011, que todavía en noviembre pasado no remedian (Expreso 28/11/2011).
Sin embargo, el 2007, Trafigura figuró entre las tres “finalistas” candidatas al título de “empresa más irresponsable”, otorgado por ‘Public eye on Davos’, red de ONGs que analizan a las empresas que cada año se dan cita en el Foro Económico Mundial, organizado en Davos, Suiza. (www.rel-uita.org/agricultura/ambiente/costa_de_marfil.htm)
Trafigura y la contaminación en Costa de Marfil
A principios de septiembre de 2006, llamó la atención mundial la noticia de una grave contaminación por vertimiento de desechos tóxicos en zonas habitadas por sectores de extrema pobreza, en Abiyán, Costa de Marfil. Estos desechos ocasionaron vómitos, asfixia y erupciones en la piel a más de 105,000 habitantes y mató a 17 (Revista Umoya. org 26 Julio 2010- España). ¿Qué había pasado? Medios de prensa europeos y de África informaron que en junio de 2006, la petrolera mexicana Pemex tenía almacenada una gran cantidad de nafta coker (que contiene grandes cantidades de azufre y sílice), que fue luego adquirida por Trafigura. Esta empresa fletó el buque de bandera panameña Probo Koala para cargar la gasolina coker en Brownsville, Texas. A bordo del buque, los empleados de Trafigura utilizaron un proceso llamado “lavado cáustico”, por el cual se trata a la gasolina coker con soda cáustica para obtener nafta. Este procedimiento barato es prohibido en casi todo el mundo, porque deriva en alta toxicidad de sus residuos, lo que no importó a Trafigura. En el barco quedaron los desechos tóxicos, conformados por hidróxido de sodio, fenoles y sulfuro de sodio.
El 2 de julio de 2006, el Probo Koala entró a Ámsterdam para descargar los desechos tóxicos, sin embargo, fue impedido y el buque continuó navegando hasta que llegó al puerto de Abiyán, en Costa de Marfil, en donde descargó 528 toneladas de desechos tóxicos (19/08/06), los mismos que fueron abandonados en basurales al aire libre en la ciudad, “que habitualmente son revueltos por marfileños pobres, niños y adultos, en busca de algún alimento o cosa vendible” (Rel-UITA.org 23/09/2009).
En septiembre de ese año un grupo de funcionarios y médicos de Trafigura llegó a Abiyán, encabezados por Claude Dauphin, CEO de Trafigura, y Jean Pierre Valentini, uno de los gerentes de la compañía. El 18 de septiembre fueron encarcelados ambos junto al capitán N’Zi Kablan, este último, gerente general de Puma Energy CI, subsidiaria de Trafigura en Costa de Marfil. Ellos estuvieron detenidos por cinco meses en la prisión de Maca, en Abiyán.
El 13 de febrero de 2007, Trafigura llegó a un arreglo con el Gobierno de Costa de Marfil, el cual paralizó toda acción legal contra Trafigura, a cambio de pagar un monto de US$ 198 millones, para “limpiar” los desechos tóxicos. En la práctica, los directivos de Trafigura compraron su libertad y fueron liberados tanto Claude Dauphin y Jean Pierre Valentini, como el capitán N’Zi Kablan (BBC News 13/02/2007). Con la mayor sangre fría y sin escrúpulos, a pesar de las evidencias, los muertos y heridos, Trafigura no admitió responsabilidad alguna en la catástrofe.
Por tal motivo, más adelante, más de 31 mil damnificados marfileños entablaron una demanda a Trafigura en el Reino Unido, debido a que allí residía su presidente, Claude Dauphin. La solución llegó tras negociaciones entre los representantes de la compañía y abogados de las víctimas, y pocas semanas antes de que el caso comenzara a ser tratado por la Alta Corte de Londres, Trafigura acordó pagarles 33 millones de euros. (reluita.org 23/09/2009).
Okechukwu Ibeanu, relator especial del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas sobre las consecuencias del transporte y derrame de desechos y productos tóxicos, dijo en ese entonces que “a simple vista parece haber pruebas suficientes de que las muertes y las consecuencias sanitarias que padecieron los marfileños están ligadas al desastre del barco Probo Koala”.
(Expreso 06/02/2012)
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